@Yanohayganas
domingo, 5 de mayo de 2013
Y así nos va.
Puede que con otros te funcione pero conmigo no. No me gusta la gente que me habla demasiado, no me gusta la gente que quiere gustarme, ni que pretende caerme bien. No me gusta la gente que me hace la pelota ni la gente que cree que me conoce a los dos días de hablar conmigo. La gente que me importa y la gente por la que hago cosas es totalmente la gente a la que no te pareces ni en un puto detalle. La gente que me importa es gente que conozco de toda la vida o gente que a los dos meses pasó a ser de lo mejor de mi vida. ¿Sabes qué? Esas cinco, seis personas son lo mejor de este puto mundo. ¿Y sabes otra cosa? No necesito que ese círculo de personas aumente. No necesito a más gente, ¿que por qué? Sencillo. Cuanta menos gente, menos decepciones. ¿Tan difícil es de entender que no quiero hablar contigo? ¿Que no quiero que me cuentes tu vida, ni contarte la mía? ¿Que no necesito que te tragues mis penas ni que te preocupes por mi? Puedo parecer fría, seca, borde, que no me preocupo por nadie, pero eso no quiere decir que sea así. ¿Crees que soy una antipática? Corre y ve a mis mejores amigos a preguntarles si cuando estoy con ellos soy como una estatua, si no hablo, si lo único que hago es contestar mal. Que sea borde contigo no significa que lo sea con todo el mundo. Sólo significa que hay gente que desde el primer momento que veo no quiero que forme parte de mi vida, punto. Y más si es gente que se interesa por mi vida simplemente para cotillear. No me gusta que la gente sólo porque vaya a mi instituto o me conozca de un par de días crea que soy su amiga o lo más gracioso, que crea que es alguien para hablar de mis amigos de verdad. No me gusta la gente que se mete en lo que hago o dejo de hacer y en lo que digo o dejo de decir cuando no afecta a NADIE. Hago lo que me sale del coño y digo lo que me sale del coño y lo más gracioso es que la gente lo critica cuando no tiene absolutamente nada que ver con ellos. Y lo mejor de todo, es cuando según qué gente trata de convencerte de que le importas, de que eres lo mejor de su vida después de haberte creado inseguridades, complejos y mierdas. Ahí sí que me comen el coño enterito. Me gustaría desaparecer por un tiempo, apuesto a que a la mayoría de la gente que me rodea se la sudaría un poco bastante. No me quejo, de hecho me da igual. Lo que me molesta es que luego vayan diciendo que les importo, cuando en realidad les intereso o por mis notas, o por mis amigos o por cualquier otra cosa que tenga que ver conmigo pero que no soy yo en sí. Y ya para terminar, un consejo desde lo más profundo de mi corazón: si soy borde, no me hables. Nadie te obliga. Gracias.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario